La opción que minimiza la injusticia del sistema monetario

11 de Octubre 2022

En una nueva ponencia del Ciclo de Conferencias en Éticas Aplicadas 2022, la académica Constanza Guajardo abordó la “Ética del Sistema Monetario Internacional”, concluyendo que la injusticia inevitable del Sistema Monetario Internacional se puede minimizar adoptando una política de tipo de cambio flotante que no erosione niveles mínimos de soberanía y autodeterminación de los estados. […]

Computador muestra estadísticas monetarias.

En una nueva ponencia del Ciclo de Conferencias en Éticas Aplicadas 2022, la académica Constanza Guajardo abordó la “Ética del Sistema Monetario Internacional”, concluyendo que la injusticia inevitable del Sistema Monetario Internacional se puede minimizar adoptando una política de tipo de cambio flotante que no erosione niveles mínimos de soberanía y autodeterminación de los estados.

¿Cómo minimizar la injusticia del sistema monetario internacional? Es la pregunta inicial que se planteó la académica del Instituto de Éticas Aplicadas UC, Constanza Guajardo, en una nueva ponencia del Ciclo de Conferencias en Éticas Aplicadas 2022, y que respondió en su presentación sobre “Ética del Sistema Monetario Internacional”.

En la exposición, la académica se preguntó cuándo existe injusticia en el Sistema Monetario Internacional (SMI). Para abordar este sistema complejo, Guajardo desagregó el sistema basándose en el principio de Mundell-Fleming, de acuerdo al cual los países no pueden tener al mismo tiempo un cambio estable, autonomía en política monetaria y mercado de capitales abierto. A lo más pueden reunir dos de estas condiciones. Esto genera tres posibles escenarios estilizados; dos con mercados de capitales abiertos, uno con tipo de cambio flotante y otro con tipo de cambio fijo, y un escenario con mercado de capitales cerrados. La académica asumió un sistema con mercado de capitales abierto, por lo que consideró los primeros dos escenarios y se preguntó cuándo hay injusticia.

Tipo de cambio flotante: soberanía y autodeterminación

En el caso del tipo de cambio flotante, Guajardo presentó el problema de los derrames monetarios. Dado que el tipo de cambio de un país es relativo al de otros, al aplicar política monetaria no solo afecta su propio tipo de cambio, sino que el de todos los demás países con respecto a este. Estos derrames afectan la soberanía y autodeterminación de los países al afectar las condiciones macroeconómicas internas, como el empleo, la inflación y el poder de compra. Por otro lado, Guajardo mostró que estos derrames pueden llevar a situaciones de crisis.

El dilema ético en este escenario es, según la académica, que por un lado estos derrames erosionan la soberanía de países que se ven afectados por los derrames, pero, por otro lado, limitar o prohibir el uso de política monetaria para evitar los derrames también traería fuertes limitaciones a la soberanía y autodeterminación de quienes los emiten. Esto se debe a que esta política es fundamental en la capacidad de los países de mantener estabilidad económica interna.

Por tanto, concluyó que en este caso la injusticia ocurre cuando la capacidad mínima de soberanía del país se ve afectada. Esto ocurre cuando los países están en crisis, pues no pueden mantener su estabilidad interna por sí mismos; dependen de otros para recuperar esa estabilidad y se muestran vulnerables al momento de aceptar condiciones. En este contexto se propone que los causantes de los derrames que llevan a una crisis asuman la responsabilidad de asistir a aquellos que la sufren hasta el punto que logren recuperar su estabilidad económica.

Tipo de cambio fijo: ventaja mutua

En el caso del tipo de cambio fijo, destacó que cuando los países fijan su moneda pierden la capacidad de aplicar política monetaria. Guajardo aclaró que en el pasado han existido sistemas con estas características, como el caso del patrón oro, pero consideró el caso de la eurozona por ser contemporáneo. En esta unión monetaria los países delegan su política monetaria al Banco Central Europeo, lo que genera algunas restricciones en soberanía. Sin embargo, hizo la salvedad que delegar la política monetaria a bancos centrales autónomos o a instituciones supranacionales que funcionen bien no impone límites relevantes a la soberanía. Las restricciones pasan a ser importantes, aclaró Guajardo, cuando estas instituciones no consideran los intereses de aquellos que delegan su poder.

En este caso, la profesora Guajardo concluyó que la injusticia ocurre cuando hay ausencia de una ventaja mutua. Esto se debe a la naturaleza del acuerdo, es decir, mantenerse en la unión monetaria debe ser justificado considerando el escenario contrafactual de mantenerse en el escenario flotante. Propuso que las instituciones de uniones monetarias deben asegurar a los estados contra los riesgos de la integración hasta que participar sea beneficioso para ellos, lo cual se puede alcanzar con un federalismo fiscal en la eurozona.

Al final de su ponencia, la académica Constanza Guajardo determinó que en una unión monetaria como la eurozona siempre se produce injusticia, mientras que en el caso flotante sólo hay injusticia en casos de crisis. De esta manera, el caso flotante minimiza la injusticia.

Sobre la presentación, el académico del Instituto de Éticas Aplicadas UC, Fernando Arancibia, comentó que “nos ayuda a entender las injusticias que se dan en el sistema monetario internacional y las diversas alternativas que tenemos para enfrentarlas. Ninguno de los sistemas vigentes es perfecto y generaran diversos tipos de injusticias”.

Constanza Guajardo

Es profesora asistente del Instituto de Éticas Aplicadas de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Es doctora (DPhil) en teoría política por la Universidad de Oxford  e ingeniera civil industrial, cientista política y magíster en ciencias de la ingeniería de la UC.

Sus áreas de investigación son la ética aplicada y la teoría política, principalmente temas sobre la ética de las crisis financieras y de la deuda. Su foco está en la ética del sistema monetario internacional y de las uniones monetarias, la ética de la especulación financiera y la ética de la deuda que toman los países para salir de una crisis con instituciones como el FMI. Ha sido invitada a presentar su trabajo en conferencias en la Universidad de Oxford y en LSE. Trabajó tres años en el banco BCI en áreas de Corporate and Investment Banking (C&IB) y fue investigadora asociada de la CEPAL.

Te invitamos a ver la conferencia completa en nuestro canal de YouTube.